Imagínate estar en Gottwald tomando una de tus tantas clases de ciencias, cuando de repente escuchas a gente correr por la puerta de tu clase y oyes el sonido de vidrios quebrándose a lo largo del pasillo. Tu profesor se alarma y los dirige a la salida, dejando la clase en pampa y agachándose para no ser visto por la ventana. Paras a una de las personas que vienen corriendo y le preguntas qué está pasando, esta te cuenta que se acaban de meter a robar y que hay que dejar el edificio.
Pareciera mentira, pero en Venezuela esto es una realidad.
Imaginate tener que escuchar historias asi seguidamente, pensar que la persona que te lo cuenta lo ve como algo normal, saber que cada dia estan peor y tener miedo de lo que el mañana le puede aguardar a uno de tus seres queridos. Está la vida de Isabella, una venezolana en la Universidad de Richmond.
Isabella es una niña bien simpática, siempre anda sonriente, abrazando a todo el que se encuentra y esparciendo mucho cariño por el lugar, sin embargo, mucha gente no sabe con lo que esta estudiante tiene que lidiar todos los días.
-“Me da miedo, mucho miedo, la inseguridad en Venezuela. Tengo miedo de despertar un dia y saber que algo le paso a alguien de mi familia”
Venezuela ahorita esta pasando por una crisis económica, política e incluso social. Este país con el mayor abastecimiento de petróleo en latinoamérica, sufre de escasez, inflación, inseguridad y mucho dolor. Cada dia que pasa se hacen más seguidos los incidentes de violencia, la opresión del gobierno aumenta y la fe la población se limita. Sin embargo, Isabella ve una luz al final del camino; “Yo se que nos encontramos muy mal ahora, no me enorgullece, pero tengo fe en que todo se va a mejorar, lo se por que la juventud venezolana que yo conozco no es conformista y tampoco ciega, es una juventud de cambios y de grandes mentes, que unidos vamos a salir adelante”
Le pregunte que si ella se quisiera regresar a Venezuela cuando se gradue, hizo una pausa y me contesto: “La verdad quisiera obtener un poco de experiencia laboral en Estados Unidos, es una buena oportunidad, mi carrera es economía y desarrollo; justo ahora estoy en busca de pasantías en instituciones que ofrecen servicios financieros a personas de bajos recursos en países de desarrollo. Busco esto por que los entiendo, entiendo lo que pasan por que mi país es uno de esos países que la tienen duro. Me gustaría volver a mi país, yo me veo teniendo a mi familia ahi, pero nose como cambiaran las circunstancias más adelante o si se me darán otras oportunidades en otros lugares. Todo dependerá del tiempo para evaluarlo, ya que ahorita no es el tiempo mas optimo para regresar, pero tengo fe en el futuro por que ya estamos comenzando a dar los pequeños pasos para el cambio”
Se nos hace dificil creer que una sociedad, no tan lejos a la tuya, puede llegar a estas circunstancias. Pensar que en vez de tener a tus papás preocupados por lo lejos que estás, vos estás más preocupado por el lugar donde ellos se han quedado. “Solo los paranoicos sobreviven, es un dicho de mi papá, suena un poco fuerte pero es nuestra realidad”