En el artículo “Asesinaron al Niño de Hollywood (y todos sabíamos eso ocurriría),” Óscar Martínez describe Miguel Ángel Tobar, un asesino en El Salvador. En otro artículo, Martínez escribe en una manera para que el lector pueda ponerse dentro de la situación. Esta crónica, sin embargo, es bastante diferente.
Para demostrar el significado de Miguel Ángel Tobar, Martínez usa tres tácticas – diálogo, repetición, y fotos. Aunque Martínez no se puso dentro de una situación específica, como en su otro artículo, hay unas citas de Miguel Ángel Tobar en la crónica que viene de una entrevista con el asesinato. Para la repetición, Martínez escribe “Miguel Ángel Tobar era asesinato” cinco veces como un párrafo separado. También, el uso de las fotos es bastante fuerte. La primera que usa es la siguiente:
Esta foto da al lector una idea de las apariencias de señor Tobar, y el tipo de persona que él es. También, Martínez puso esta foto:
Esta foto demuestra el poder que Tobar tenía mientras ser un asesinato. La sangre y el brazo de un humano muerto es un imagen poderoso, y muestra el hecho de que Tobar robaba hijos, padres, esposos, hijas, madres, y esposas de otras personas. Porque él era un asesinato, había tanta gente que ya no tienen los que aman en sus vidas.
Para el estilo que Martínez usa, escribe con esfuerzo en frases cortos. En vez de contar una historia con frases complicadas, la manera en que escribe es bastante conciso y dice al lector lo que tiene que saber.